Prensa Minería.- El desarrollo de la actividad minera venezolana, es de gran importancia para el impulso del sector industrial y económico de la nación.

Para llevar a cabo una actividad minera eficiente, es importante conocer el ciclo de vida de la misma, de allí parten los lapsos establecidos para el desarrollo de las labores que posibilitan determinar los recursos y reservas, así como el aprovechamiento de los recursos minerales, respetando el ambiente al establecer los parámetros para la mitigación de la afectación generada por la actividad.

El ciclo de vida de la actividad minera posee varias etapas, partiendo desde la Prospección, siendo está la fase donde se realiza el reconocimiento del depósito mineral a ser utilizado; se delimita el área a investigar de aproximadamente 50 km2 para una próxima exploración, aplicando grandes extensiones de terreno dejando espacios entre las tomas de muestras, así mismo se aplican métodos geoquímicos y geofísicos precisos a utilizar en cada uno de los casos.

En segundo lugar, la Exploración a diferencia de la prospección, está busca delinear el depósito mineral para una futura evaluación económica, a través del método geológico directo obtienen datos como las leyes, distribución, tamaño, geometría, densidad, entre otros, para luego ser interpretados mediante la ayuda de un software minero.

En tercer lugar, Certificación de reservas, en esta etapa se llevan a cabo trabajos de campo por los técnicos de un servicio geológico especializado,
quienes confirman la información generada en la exploración y certifican el volumen de reservas probadas y probables existentes en un yacimiento,
previamente ubicadas por particulares.

En cuarto lugar, Aprovechamiento del mineral, en este periodo comienzan las obras de infraestructura para la producción minera, la aplicación del mismo varía dependiendo del estado físico del mineral (sólido, líquido, gas, o sólido soluble o fusible), así como su profundidad y forma (a cielo abierto o subterráneo), entre otras características. Esta etapa incluye la comercialización del mineral.

Finalmente, el ciclo de vida de la actividad minera concluye con el Cierre de minas, esta fase es primordial para la conservación del ambiente, la misma adopta las medidas necesarias antes, durante y después del cierre de operaciones, a fin de contrarrestar los efectos generados por la actividad, logrando la preservación del ecosistema.

El Motor Minero, tiene como bandera la protección y conservación de ecosistemas, orientado nuestros esfuerzos en el cumplimiento del 5to objetivo de la Patria, como guía de ruta para el cuidado y preservación de la Pachamama.

Del mismo modo, el Gobierno Bolivariano impulsa políticas públicas socioeconómicas para el aprovechamiento consiente de los recursos minerales de
la nación, con el esfuerzo articulado de instituciones públicas, privadas, comunitarias y mixtas, en aras de fortalecer el aparato productivo nacional para el vivir bien del pueblo venezolano.

¡Tenemos mucho por hacer!
#MotorMineroEnMarcha

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