Prensa Minería.- El 18 de julio de 1918, nace Nelson Mandela, activista, abogado y político sudafricano, que dedicó su vida a la lucha por la igualdad racial.
Fundó el Congreso Nacional Africano (ANC), en 1944, junto a sus amigos, para luchar contra la desigualdad de razas; motivo por el cual tuvo que enfrentarse a muchas denuncias y fue juzgado por traición.
En el año 1962, fue arrestado por conspiración contra el Gobierno y se le condenó a cadena perpetua.
Durante su audiencia, Mandela se encargó de su propia defensa, sin embargo, terminaría pasando 27 años encarcelado debido a sus ideales.
Mientras se encontraba en prisión, el racismo y la violencia en su país, seguían creciendo significativamente, motivo por el cual las personas salían a las calles a protestar no solo para continuar la lucha contra el Gobierno de la minoría blanca, sino también para exigir la libertad de Mandela.
Con el pasar de los años, la comunidad internacional intensificó las sanciones contra el régimen del apartheid (sistema de segregación racial) y finalmente la presión mundial daría resultados, ya que el 11 de febrero 1990 el Estado sudafricano decidió poner en libertad a Mandela.
La liberación de Mandela marcó el inicio de una nueva política en este país, tres meses después de salir de la cárcel, fue elegido para liderar el Congreso Nacional Africano (CNA) y comenzó a dirigir negociaciones que permitieron la transición hacia la democracia multirracial. Es así, como en 1994 se celebran las primeras elecciones democráticas de la historia de Sudáfrica, en las que él arrasó y gracias al pueblo se convierte en el primer presidente negro de su país hasta 1999.
Su mandato se enfocó en derribar la estructura política y social heredada del apartheid, a través del combate del racismo institucionalizado, la pobreza, la desigualdad social y la promoción de la reconciliación social.
Después de 5 años liderando como presidente de su país, Nelson Mandela decide retirarse de la política en 1999, pero sin abandonar del todo sus tareas. En el 2004 anunció su retiro definitivo de la vida pública y la política y finalmente el 5 de diciembre del 2013, Mandela fallece debido a una infección respiratoria a sus 95 años.
Su lucha contra la impunidad fue permanente, por lo que en 1993 recibió el Premio Nobel de la Paz. Así mismo, obtuvo diversos reconocimientos más, como la Medalla Presidencial de la libertad y el Premio Lenin de la Paz, por su mensaje de reconciliación y convivencia entre razas, que logró la transición de Sudáfrica hacia la democracia.
Nelson Mandela, por siempre será recordado y reconocido como uno de los símbolos de derechos humanos más importantes de la historia, fue un hombre cuya dedicación a las libertades de su pueblo ha inspirado a los defensores de estos derechos a lo largo del mundo.
“He abrigado el ideal de una sociedad libre y democrática en que todas las personas vivan unidas en armonía y con las mismas oportunidades. Es un ideal por el que espero vivir y que espero alcanzar. Pero si es necesario, es un ideal por el que estoy preparado para morir”.
Nelson Mandela
¡Tenemos mucho por hacer!
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